Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 93
PROGRAMA DE EJERCICIOS PARA MEJORAR LA MOTRICIDAD FINA DE LAS
BASTONERAS DE LA UNIDAD EDUCATIVA PICHINCHA
EXERCISE PROGRAM TO IMPROVE THE FINE MOTOR SKILLS OF THE
MAJORETTES OF UNIDAD EDUCATIVA PICHINCHA
Autores: ¹Danilo Vladimir Escobar Gavilanes y ²Reynier Rodríguez González.
¹ORCID ID: https://orcid.org/0009-0000-2268-9740
²ORCID ID: https://orcid.org/0000-0002-4971-6814
¹E-mail de contacto: danilo.escobargavilanes1956@upse.edu.ec
²E-mail de contacto: rrodriguezg@upse.edu.ec
Afiliación:
1*2*
Universidad Estatal Península de Santa Elena, (Ecuador).
Artículo recibido: 26 de Octubre del 2025
Artículo revisado: 27 de Octubre del 2025
Artículo aprobado: 29 de Octubre del 2025
¹Licenciado en Ciencias de la Educación mención Educación Física, adquirido de la Universidad Internacional de la Integración de
América Latina, (Nicaragua) con 5 años de experiencia laboral como docente en la Unidad Educativa Pichincha, (Ecuador). Maestrante
en la Maestría en Entrenamiento Deportivo de la Universidad Estatal Península de Santa Elena, (Ecuador).
²Licenciado en Cultura Física. Máster en Actividad Física en la Comunidad y Doctor en Ciencias de la Cultura Física por la Universidad
de las Ciencias de la Cultura Física, (Cuba). Máster en Humanidades, Arte, Literatura y Cultura Contemporánea por la Universidad
Abierta de Cataluña, (España). Cuenta con más 25 años de experiencia en la Educación Superior en diversas universidades. Profesor de
la Maestría en Entrenamiento Deportivo de la Universidad Estatal Península de Santa Elena (Ecuador) y de la Universidad de Guayaquil
(Ecuador). Actualmente, cursa la Maestría en Filosofía para los Retos Contemporáneos (España).
Resumen
El desarrollo de las habilidades motoras finas
desempeña un papel fundamental en la
competencia técnica y en el rendimiento físico.
Las limitaciones en este ámbito pueden afectar
negativamente la coordinación, la fuerza, la
postura corporal y la eficacia general en la
ejecución de tareas. El presente estudio tuvo
como propósito analizar estos factores en el
contexto del entrenamiento con bastón y
diseñar una propuesta de intervención para
atender las deficiencias identificadas. La
investigación se llevó a cabo en las bastoneras
de la Unidad Educativa Pichincha, utilizando
diagnósticos basados en encuestas y el Test de
Desarrollo de Integración Visomotora de
Beery-Buktenica. La muestra estuvo
compuesta por 45 bastoneras. Las variables
evaluadas incluyeron el dominio técnico del
bastón, la coordinación óculo-manual, la fuerza
de las extremidades superiores, la postura
corporal y la frecuencia de entrenamientos
complementarios fuera de las sesiones
regulares. Los resultados evidenciaron
limitaciones significativas en el dominio
técnico, la coordinación, la fuerza, la postura y
la consistencia de la práctica. Una proporción
considerable de participantes obtuvo
puntuaciones medias o bajas en la evaluación
final, lo que refleja una experiencia restringida
en el entrenamiento de la motricidad fina. Estos
hallazgos se confirmaron con las pruebas, que
mostraron que quienes presentaban menor
autoeficacia alcanzaban desempeños inferiores
en la reproducción de patrones gráficos y líneas
modelo. Asimismo, se determinó que la
debilidad en fuerza y resistencia afectaba
negativamente el control del bastón, mientras
que la práctica irregular limitaba el progreso en
precisión y coordinación. La relación entre la
postura corporal deficiente y un menor
rendimiento técnico también se hizo evidente.
Las correlaciones entre los datos subjetivos y
objetivos respaldan la importancia de la
autopercepción en el análisis de las habilidades
motoras. En función de los diagnósticos
obtenidos, se diseñó un programa de ejercicios
específicos e incrementales, integrando
componentes físicos y técnicos con el fin de
favorecer mejoras progresivas en la motricidad
fina vinculada al manejo del bastón.
Palabras clave: Unidad Educativa
Pichincha, Coordinación óculo-manual,
Bastoneras, Motricidad fina, Programa de
ejercicios.
Abstract
The development of fine motor skills plays a
key role in technical proficiency and physical
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 94
performance. Limitations in this area may
negatively affect coordination, strength,
posture, and overall effectiveness in task
execution. The present study aimed to analyze
these factors in the context of cane training and
to design an intervention program to address
the identified deficiencies. The research was
conducted in the cane training centers of the
Pichincha Educational Unit, using survey-
based diagnostics and the Beery-Buktenica
Developmental Test of Visual-Motor
Integration. The sample consisted of 45 cane
training centers. Variables assessed included
technical mastery of the cane, hand-eye
coordination, upper limb strength, body
posture, and the frequency of supplementary
training beyond regular practice. The findings
revealed significant limitations in technical
mastery, coordination, strength, posture, and
practice consistency. A considerable
proportion of participants scored within the
average or low range in the final assessment,
indicating restricted experience in fine motor
skill training. These results were corroborated
by test data showing that individuals with lower
self-efficacy performed poorly in accurately
reproducing graphic patterns and model lines.
Weaknesses in strength and endurance
negatively influenced cane control, while
irregular practice hindered improvements in
coordination and movement precision. An
association between poor body posture and
reduced technical performance was also
observed. The consistency between subjective
perceptions and objective test results highlights
the relevance of self-perception in motor skill
analysis. Based on these diagnostic findings, a
task-specific and incremental exercise program
was designed, integrating physical and
technical components to promote progressive
improvement in fine motor skills related to
cane grips.
Keywords: Pichincha Educational Unit,
Hand-eye coordination, Cane training, Fine
motor skills, Exercise program.
Sumário
O desenvolvimento das habilidades motoras
finas desempenha um papel essencial na
proficiência técnica e no desempenho físico. As
limitações nesse domínio podem comprometer
a coordenação, a força, a postura corporal e a
eficácia geral na execução de tarefas. O
presente estudo teve como objetivo analisar
esses fatores no contexto do treinamento com
bengala e elaborar uma proposta de intervenção
para enfrentar as deficiências identificadas. A
pesquisa foi realizada nos centros de
treinamento de bengala da Unidade
Educacional Pichincha, com base em
diagnósticos por questionários e no Teste de
Desenvolvimento da Integração Visomotora de
Beery-Buktenica. A amostra incluiu 45 centros
de treinamento. As variáveis avaliadas
abrangeram o domínio técnico do uso da
bengala, a coordenação óculo-manual, a força
dos membros superiores, a postura corporal e a
frequência de treinos complementares fora das
sessões regulares. Os resultados evidenciaram
limitações significativas no domínio técnico,
na coordenação, na força, na postura e na
consistência da prática. Uma proporção
considerável dos participantes obteve
pontuações médias ou baixas na avaliação
final, refletindo experiência restrita no treino da
motricidade fina. Esses achados foram
confirmados pelos testes, que mostraram que
indivíduos com menor autoeficácia
apresentaram desempenho inferior na
reprodução precisa de padrões gráficos e
linhas-modelo. A fraqueza em força e
resistência afetou negativamente o controle da
bengala, enquanto a irregularidade da prática
limitou o progresso em precisão e coordenação.
Também foi observada associação entre
postura corporal inadequada e menor
rendimento técnico. A consistência entre
percepções subjetivas e resultados objetivos
confirma a relevância da autopercepção na
análise das habilidades motoras. Com base
nesses diagnósticos, foi desenvolvido um
programa de exercícios específicos e
incrementais, que integra componentes físicos
e técnicos com o objetivo de promover
melhorias progressivas na motricidade fina
relacionada ao manuseio da bengala.
Palavras-chave: Unidade Educacional
Pichincha, Coordenação óculo-manual,
Treinamento com bengala, Motricidade fina,
Programa de exercícios.
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 95
Introducción
La educación corporal tiene actualmente una
relevancia esencial, no solo por su connotación
en la salud y el bienestar de las personas, sino
igualmente por su rol en la formación integral
del ser humano. En relación con eso, resulta
necesario que todo hecho o fenómeno
conectado al contexto educativo sea abordado
desde bases epistemológicos sólidas. Solo de
esta forma es posible brindar a la educación
corporal de un carácter científico que posibilite
analizarla, entenderla y desarrollarla con rigor
académico y con pertinencia en los múltiples
escenarios socioculturales (Rodríguez, 2024).
El bastoneo es una presentación deportiva y
elegante que involucra la combinación de
tradición, disciplina y arte físico. Como
metáfora del escenario ecuatoriano, las
bastoneras son personas que equilibran y
mantienen su gracia en presentaciones cívicas,
culturales o educativas. Se espera que el bastón
sea coordinado con precisión, para lo cual se ha
necesitado gran habilidad, requiriendo un alto
grado de destreza. De la mano de una zona rural,
por primera vez en su historia, ha conseguido
conformar un grupo de malabares con bastón,
marcando así todo un hito institucional y
abriéndoles las puertas a vivencias que
fortalezcan motores específicos (Simba, 2023).
La coordinación motora fina es un tipo de
habilidad psicomotora en la que se requiere la
actividad óculo-manual coordinada (como
simplemente regar plantas o practicar una
escritura compleja o cualquier cosa que pueda
surgir en el futuro (Rodríguez, 2024). Estas
unidades motoras permiten los movimientos
finos normales que son inherentemente
necesarios para hacer contacto con (sostener,
usar) cualquier objeto (el bastón). La
coordinación es un concepto central en la danza
del malabarismo con bastones, siendo la
capacidad de coordinar y sincronizar los
movimientos de numerosos grupos musculares
entre de manera que no solo todas las
acciones sean eficientes, sino también estéticas.
Mismos los cuales incluyen la planificación
motora, el control neuromuscular y la
aplicación de fuerza. Por su parte, la falta de
dominio adecuado de la coordinación conduce
directamente a una ejecución inexacta, fallos en
cómo se maneja el bastón y poca
espectacularidad durante las interpretaciones,
situaciones que se reflejan en el desarrollo del
grupo y la proyección artística (Bustamante et
al., 2022).
Estudios tales como el de Chero (2021)
informan sobre la práctica sistemática del
ejercicio motor que conduce a funciones de
nivel cero. Cuanto más se practica utilizando
técnicas como lanzamientos, recepciones y
objetos de diferentes texturas y tamaños, el
dominio de la coordinación óculo-manual
progresa. En consecuencia, cuando se trata de
desarrollar habilidades motoras finas en el
malabarismo con bastones, la práctica del
movimiento controlado y el giro con el juguete
favorito ofrece una oportunidad para
perfeccionar la precisión, el ritmo y la fluidez.
Las bastoneras son un subgrupo de la Unidad
Educativa Pichincha y tienen peculiaridades
únicas que necesitan un manejo especial. Todo
está en una condición de nivel aficionado, en
cuanto a la forma física del miembro y su
experiencia en el manejo del bastón. Tal estado
de cosas se manifiesta en forma de problemas
con la ejecución exitosa de figuras,
movimientos tomados correctamente y
coordinación sincronizada con la música. En
esta situación, surgió la oportunidad de diseñar
y practicar algunos ejercicios simples de control
motor fino, que reforzaron su desempeño
individual y también lo integraron con el grupo.
Este grupo necesitaba una propuesta para un
programa de ejercicios, que responda no solo a
un interés técnico sino también a una necesidad
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 96
pedagógica y cultural. En su totalidad, incluye
mucho más que solo el lado hermoso de girar un
bastón, y ayuda a los individuos a desarrollar
valores/parte de su formación integral como la
disciplina, la perseverancia y el espíritu de
equipo. Así, el entrenamiento motor asume un
papel formativo más allá de la práctica
deportiva ya de por amplia, impactando
positivamente en la autoestima y la
participación de los estudiantes en la
comunidad escolar. La arquitectura de este
programa implica tener en cuenta otras
dimensiones como la edad, la etapa de
desarrollo motor, el acceso a recursos y el
tiempo de práctica. El grupo está compuesto por
niños de nueve a dieciséis años, en una etapa
donde el sistema nervioso y muscular de estos
niños aún tiene una alta capacidad de
adaptación. Aprovechar al máximo esta ventana
de desarrollo es clave para optimizar los
resultados, estableciendo algunas rutinas
progresivas repetibles que no solo entrenan las
articulaciones y la fuerza de las extremidades
superiores, sino también la coordinación fina
(Soria, 2023).
En este sentido, la investigación que da origen a
la propuesta se lleva a cabo en un diseño
descriptivo y cuasiexperimental, que busca
medir el estado de los sujetos involucrados
utilizando un sistema de evaluación antes de
aplicar el programa. La evaluación inicial no
solo revela la presencia de posibles
restricciones motoras, sino que también ayuda a
determinar objetivos exactos para su
eliminación dentro del programa de
entrenamiento. Por lo tanto, se implementan
ejercicios para luego mejorar la precisión en los
dedos, muñeca, antebrazo, brazo y postura
correcta y movimiento del bastón mientras se
realizan condiciones de juego. El efecto
anticipado de este programa no es solo un
avance técnico. Porque este desarrollo de
habilidades motoras finas está relacionado con
otros tipos de funcionalidad, como la escritura
o la expresión gestual, y termina beneficiando
al niño en relación con la coordinación. El
mejor control motor conduce a actividades
diarias más efectivas y seguras de los sujetos.
Por esta razón, el proyecto va más allá del
espacio de ensayo y abarca toda la vida de los
malabaristas de bastones en las escuelas.
También ofrece un gran valor cultural. Entre las
artes escénicas que desarrollan el orgullo
cultural local y el compromiso cívico en las
celebraciones comunitarias, el malabarismo con
bastones es una de ellas. Tener un grupo de
malabaristas de bastones con habilidades
motoras avanzadas a nivel local puede servir
como un faro para otros grupos, creando un
efecto domipara promover la cultura de las
artes vivas y experiencias donde los grupos
puedan formarse y abstenerse de abandonar la
tradición (Arias y Charry, 2024).
La falta de apoyo del Estado con las actividades
extracurriculares de la institución exigió que el
grupo de Twirling y sus componentes
comenzaran a auto gestionarse, lo que termina
siendo solo otro trabajo extra para los padres. La
ejecución del programa, al igual que la de la
comunidad, se realizó colectivamente con todos
los involucrados, aumentando así la propiedad
y el compromiso con el proyecto. La noticia de
un posible sistema de entrenamiento que sea
completo y eficiente motiva a sus miembros
además de organizar mejor las prácticas
(Barreto, 2022). Por lo tanto, el programa de
ejercicios para mejorar las habilidades motoras
finas de los malabaristas de bastones en el
Colegio Camilo Ponce es una respuesta a una
necesidad real y urgente. Utilizará la tecnología
para optimizar el rendimiento técnico, aumentar
la cohesión del grupo y valorar los principios
que dejan un impacto positivo en el desarrollo
combinado de sus participantes. Considerando
que la propuesta se establece en bases teóricas,
metodológicas y prácticas suficientes que
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 97
justifican su relevancia y viabilidad, soñamos
que sea vista como un modelo de referencia para
entrenar malabaristas de bastones dentro de
escenarios educativos similares.
Materiales y Métodos
El enfoque metodológico se caracterizó por una
investigación descriptiva y cuasiexperimental,
seleccionada y utilizada con el fin de analizar en
profundidad los efectos de un programa de
ejercicios en el proceso de desarrollo de las
habilidades motoras finas para la técnica de
sostener la batuta. Esta estrategia metodológica
también fue elegida debido a su capacidad para
describir las modificaciones particulares
involucradas en el aprendizaje motor de los
sujetos. Se empleó un diseño de modelo
preexperimental con una línea de base de
pretest, intervención y post-test. Tuvimos tal
secuenciación para asegurar que hubiera una
gran mejora relativa de las variables propuestas,
contribuyendo a la validación interna de los
resultados obtenidos. El diseño
cuasiexperimental fue seleccionado porque es
raro poder llevar a cabo una aleatorización
completa en entornos educativos. Tanto la edad,
el nivel de desarrollo motor como la experiencia
previa en el uso de la batuta eran similares para
el grupo "natural" de estudiantes utilizado en
este caso. La homogeneidad del tipo MV
favoreció que los hallazgos reflejaran con
mayor precisión el impacto de los ejercicios
sugeridos, sin sesgos resultantes de
disparidades muy, muy evidentes entre los
pares.
Se analizaron dos grupos de estudiantes
femeninas (45 en total), con edades
comprendidas entre 9 y 16 años. Estas
estudiantes estaban cursando los niveles de
educación general básica hasta bachillerato, en
la Unidad Educativa Pichincha. El tamaño de la
muestra era idéntico a toda la población del
grupo de bastoneras de la institución educativa,
en el cual todos los miembros activos
participaron en la práctica. Todas presentaron
características similares en términos de etapa de
desarrollo físico y habilidad básica para
manipular el bastón. Hecho el cual fue lo
principal para tener una comparación más
realista, ya que la variabilidad de diferencias
entre los sujetos no era lo suficientemente
grande como para cambiar los resultados. La
elección de usar un grupo completo también
aumentó la validez externa de la investigación
porque los hallazgos pueden generalizarse más
fácilmente a la vida real de los grupos de
bastoneras.
Dentro de los criterios de inclusión, se
encuentran:
Tener un registro oficial en la Unidad
Educativa Pichincha
Cumplir con los horarios y asistir a todas las
prácticas y sesiones de entrenamiento.
No tener lesiones físicas o enfermedades que
afecten la función motora.
Consentimiento informado firmado por los
padres o tutores.
Dentro de los criterios de exclusión, se
encuentran:
Haber estado faltando repetidamente a las citas
de entrenamiento.
Problemas de salud que impiden la
participación en las actividades programadas.
No entregar el consentimiento informado a la
institución.
El uso de tales criterios permitió incluir solo a
los sujetos que cumplían con los requisitos
mínimos para el ejercicio seguro y el correcto
desempeño de los ejercicios. Los datos
preliminares fueron recolectados mediante un
cuestionario estructurado desarrollado a partir
de las referencias teóricas del desarrollo motor
y de los programas de entrenamiento funcional.
Este cuestionario incluyó el nivel percibido de
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 98
dominio del palo, la coordinación óculo-
manual, la fuerza de brazos y manos, la
frecuencia de práctica independiente, la postura
corporal, la dificultad en ajustes coordinativos,
la experiencia previa en habilidades motoras
finas, la fuerza física y la coordinación en el
balanceo del palo. También se utili la
observación física como método de registro.
Dentro de tal contexto se creó una escala
sistemática con ese propósito para realizar una
evaluación sobre la ejecución del movimiento,
las puntuaciones técnicas, la calidad general de
la posición. Este dispositivo permitió identificar
el progreso de la coordinación motora y la
adaptación postural entre los estudiantes
durante su entrenamiento. Para un análisis más
extenso, se utilizó la Prueba de Desarrollo de
Integración Visual-Motora de Beery-Buktenica
tanto en las sesiones de pretest como de postest.
Dicho instrumento permitió evaluar hasta qué
punto se combinan la percepción visual y la
respuesta motora, lo cual es un elemento
importante en el proceso de desarrollo motor
fino. La utilización de pruebas estándar fue un
pilar clave para ayudar a validar los datos
recopilados y proporcionó una visión más
imparcial de los efectos obtenidos. El programa
de intervención duró tres meses, dividido en tres
sesiones a la semana y con una duración
aproximada de 60 minutos por sesión. Las
cuatro etapas principales fueron comunes en
todas las sesiones:
Calentamiento: Ejercicios de movilización
articular, activación muscular de
brazos/manos/hombros, para preparar el
sistema neuromuscular para los ejercicios
siguientes y minimizar el número de lesiones.
Cuerpo: Había ejercicios específicos para los
dedos, que consistían en entrenamiento de
fuerza de dedos/muñeca/antebrazo/brazo
superior utilizando pelotas de plástico,
plastilina, escalada, etc., y ejercicios de
coordinación óculo-manual en forma de jugar
con bastones, pellizco y sujeción digital, lanzar
y atrapar una pelota, con diversos grados de
peso, textura y posibilidad. Se incluyeron
algunas manipulaciones específicas con
bastones para mejorar la precisión y fluidez de
los movimientos.
Suplementario: Dinámicas de agilidad con aros
y conos y correcciones posturales con espejos.
Estos estaban diseñados para fortalecer la
integración izquierda-derecha y una alineación
óptima durante la realización de movimientos.
Enfriamiento: Se finalizaba con estiramientos
dirigidos a brazos, manos y hombros, para
inducir la recuperación muscular y evitar la
sobrecarga muscular.
Durante esta fase de preprueba, se utilizaron la
encuesta, la guía de observación, la prueba de
Beery-Buktenica y las evaluaciones físicas de
resistencia, fuerza y entrada al modelo de
Hanushek. Hecho el cual proporcionó una
referencia de base. Luego, después de la
implementación del programa de intervención,
se creó la fase de postprueba y se aplicaron las
mismas herramientas de evaluación. Esto
permitió una buena comparación de los
resultados iniciales y finales y la mejora en las
diversas variables. Para las mediciones
cuantitativas, se utilizaron hojas de cálculo para
realizar un análisis descriptivo en relación con
sus frecuencias y proporciones. Las estadísticas
se compilaron en tablas y figuras que
transmitieron adecuadamente el objetivo
alcanzado. También se incorporaron notas de
sesión registradas de manera cualitativa junto
con entrevistas breves con maestros y padres.
Estos conocimientos ayudaron a explicar las
transiciones observadas y proporcionaron
cualitativamente razones para las características
de la heterogeneidad de la respuesta. Como
parte del programa, se adaptaron palos
apropiados para la edad de las estudiantes, así
como pelotas de diferentes tamaños y texturas,
conos y aros para la práctica de agilidad,
cronómetros para controlar el tiempo, espejos
para el ajuste de postura y hojas de registro. Las
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 99
intervenciones se llevaron a cabo en los grandes
espacios de la institución (canchas, pasillos) sin
comprometer la seguridad y la movilidad.
Resultados y Discusión
En base a la realización de la pertinente
encuesta, se obtuvieron los siguientes
resultados:
Tabla 1. Nivel actual de dominio del bastón
Calificación
Alto
Medio
Bajo
Total
Nro. de encuestados
17
22
6
45
Fuente: elaboración propia
De la tabla y grafico pertenecientes a la primera
pregunta de la encuesta realizada se puede
apreciar que el 38% de los encuestados
(conformados por 17 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), declaran
tener actualmente un dominio alto sobre el
bastón. Por otro lado, el 49% de los encuestados
(representados por 22 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), afirman tener
actualmente un dominio medio sobre el bastón.
Y finalmente, el 13% restante de los
encuestados (conformados por 6 bastoneras
pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha) manifiestan tener actualmente un
dominio bajo sobre el bastón.
Tabla 2. Forma de evaluación de coordinación
óculo-manual durante el bastoneo
Calificación
Aceptable
Deficiente
Total
Nro. de
encuestados
27
5
45
Fuente: elaboración propia
De la tabla y grafico pertenecientes a la segunda
pregunta de la encuesta realizada se puede
apreciar que el 29% de los encuestados
(representados por 13 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), evalúan su
coordinación óculo-manual durante el bastoneo
como muy buena. Por otro lado, el 60% de los
encuestados (conformados por 27 bastoneras
pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), evalúan su coordinación óculo-
manual durante el bastoneo como aceptable. Y
finalmente, el 11% de los encuestados
(representados por 5 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), evalúan su
coordinación óculo-manual durante el bastoneo
como deficiente.
Tabla 3. Nivel de fuerza en brazos y manos considera
que posee para manipular el bastón
Calificación
Suficiente
Moderada
Insuficiente
Total
Nro. de
encuestados
8
17
20
45
Fuente: elaboración propia
De la tabla y grafico pertenecientes a la tercera
pregunta de la encuesta realizada se puede
apreciar que el 18% de los encuestados
(conformados por 8 bastoneras pertenecientes a
la Unidad Educativa Pichincha), afirman poseer
un nivel suficiente de fuerza en brazos y manos
para manipular el bastón. Por otro lado, el 38%
de los encuestados (representados por 17
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), manifiestan poseer un nivel
moderado de fuerza en brazos y manos para
manipular el bastón. Y finalmente, el 44%
restante de los encuestados (conformados por
20 bastoneras pertenecientes a la Unidad
Educativa Pichincha) declaran poseer un nivel
insuficiente de fuerza en brazos y manos para
manipular el bastón.
Tabla 4. Frecuencia de practica de bastoneo
fuera de los entrenamientos
Calificación
Siempre
Algunas
veces
Nunca
Total
Nro. de
encuestados
4
30
11
45
Fuente: elaboración propia
De la tabla y grafico pertenecientes a la cuarta
pregunta de la encuesta realizada se puede
apreciar que el 9% de los encuestados
(representados por 4 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), manifiestan
siempre practicar bastoneo fuera de los
entrenamientos. Por otro lado, el 67% de los
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 100
encuestados (conformados por 30 bastoneras
pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), afirman solo algunas veces
practicar bastoneo fuera de los entrenamientos.
Y finalmente, el 24% de los encuestados
(representados por 11 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), declaran
nunca practicar bastoneo fuera de los
entrenamientos.
Tabla 5. Calificación de postura corporal al
realizar rutinas
Calificación
Correcta
Parcialmente
correcta
Incorrecta
Total
Nro. de
encuestados
16
21
8
45
Fuente: elaboración propia
De la tabla y grafico pertenecientes a la quinta
pregunta de la encuesta realizada se puede
apreciar que el 35% de los encuestados
(conformados por 16 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), califican su
postura corporal al realizar rutinas como
correcta. Por otro lado, el 47% de los
encuestados (representados por 21 bastoneras
pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), califican su postura corporal al
realizar rutinas como parcialmente correcta. Y
finalmente, el 18% restante de los encuestados
(conformados por 8 bastoneras pertenecientes a
la Unidad Educativa Pichincha) califican su
postura corporal al realizar rutinas como
incorrecta.
Figura 1. Impacto que tendrá el programa de ejercicios
en su motricidad fina
Del grafico pertenecientes a la sexta pregunta de
la encuesta realizada se puede apreciar que el
60% de los encuestados (representados por 27
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), consideran que el programa de
ejercicios mejorara mucho su motricidad fina.
Por otro lado, el 29% de los encuestados
(conformados por 13 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), afirman que
el programa de ejercicios mejorara poco su
motricidad fina. Y finalmente, el 11% de los
encuestados (representados por 5 bastoneras
pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), manifiestan que el programa de
ejercicios no mejorara para nada su motricidad
fina.
Figura 2. Frecuencia en que se le dificulta coordinar
movimientos con el bastón
Del grafico pertenecientes a la séptima pregunta
de la encuesta realizada se puede apreciar que el
47% de los encuestados (conformados por 21
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), declaran presentar dificultades para
coordinar movimientos con el bastón de manera
frecuente. Por otro lado, el 40% de los
encuestados (representados por 18 bastoneras
pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), manifiestan presentar dificultades
para coordinar movimientos con el bastón de
manera ocasional. Y finalmente, el 13%
restante de los encuestados (conformados por 6
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha) afirman nunca presentar dificultades
para coordinar movimientos con el bastón.
60%
29%
11%
6.¿QUÉ IMPACTO CREE QUE TENDRÁ EL
PROGRAMA DE EJERCICIOS EN SU
MOTRICIDAD FINA?
Mejorará mucho Mejorará poco No mejorará
47%
40%
13%
7.¿CON QUÉ FRECUENCIA PRESENTA
DIFICULTADES PARA COORDINAR
MOVIMIENTOS CON EL BASTÓN?
Frecuentemente Ocasionalmente Nunca
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 101
Figura 3. Frecuencia en las que recibe
entrenamiento específico en motricidad fina
Del grafico pertenecientes a la octava pregunta
de la encuesta realizada se puede apreciar que el
20% de los encuestados (representados por 9
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), declaran haber recibido varias veces
entrenamiento específico en motricidad fina.
Por otro lado, el 33% de los encuestados
(conformados por 15 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), manifiestan
haber recibido una vez entrenamiento
específico en motricidad fina. Y finalmente, el
47% de los encuestados (representados por 21
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), afirman nunca haber recibido
entrenamiento específico en motricidad fina.
Figura 4. Frecuencia en las que recibe
entrenamiento específico en motricidad fina
Del grafico pertenecientes a la novena pregunta
de la encuesta realizada se puede apreciar que el
12% de los encuestados (conformados por 4
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), evalúan su resistencia física para
presentaciones largas como muy adecuada. Por
otro lado, el 57% de los encuestados
(representados por 20 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), evalúan su
resistencia física para presentaciones largas
como medianamente adecuada. Y finalmente, el
31% restante de los encuestados (conformados
por 11 bastoneras pertenecientes a la Unidad
Educativa Pichincha) evalúan su resistencia
física para presentaciones largas como poco
adecuada.
Figura 5. Frecuencia de control de velocidad y
dirección del bastón
Del grafico pertenecientes a la cima pregunta
de la encuesta realizada se puede apreciar que el
40% de los encuestados (representados por 18
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), manifiestan siempre controlar
correctamente la velocidad y dirección del
bastón. Por otro lado, el 49% de los encuestados
(conformados por 22 bastoneras pertenecientes
a la Unidad Educativa Pichincha), afirman solo
algunas veces controlar correctamente la
velocidad y dirección del bastón. Y finalmente,
el 11% de los encuestados (representados por 5
bastoneras pertenecientes a la Unidad Educativa
Pichincha), consideran nunca controlar
correctamente la velocidad y dirección del
bastón. Los resultados de las cuarenta y cinco
bastoneras de la Unidad Educativa Pichincha
implicaron que se debería implementar una
aplicación adicional de evaluación para medir
mejor la aptitud de desarrollo de la motricidad
fina. La encuesta mostró una disminución en la
fuerza muscular, el movimiento óculo-manual y
20%
33%
47%
8.¿CUÁNTAS VECES HA RECIBIDO
ENTRENAMIENTO ESPECÍFICO EN
MOTRICIDAD FINA?
Varias veces Una vez Nunca
12%
57%
31%
9.¿CÓMO EVALÚA SU RESISTENCIA FÍSICA
PARA PRESENTACIONES LARGAS?
Muy adecuada Medianamente adecuada
Poco adecuada
40%
49%
11%
10.¿CON QUÉ REGULARIDAD CONTROLA
CORRECTAMENTE LA VELOCIDAD Y
DIRECCIÓN DEL BASTÓN?
Siempre Algunas veces Nunca
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 102
la integración y corrección de la posición del
cuerpo, así como una baja frecuencia de
práctica fuera de los entrenamientos, lo que
justificó la inclusión de pruebas estandarizadas
para la confirmación y profundización con
respecto al diagnóstico inicial. Para la
evaluación de la capacidad de combinar la
percepción visual con la ejecución motora fina,
se implementó la Prueba de Desarrollo de
Integración Visomotora de Beery-Buktenica.
Se consideró adecuada ya que proporciona un
medio para medir la precisión sistemática para
replicar patrones gráficos importantes para
prescribir actividades dentro de un programa de
ejercicios. Esta encuesta previa también
encontró que el 47% de los encuestados nunca
había recibido entrenamiento específico para
habilidades motoras finas, lo que valida esta
selección.
La prueba se realizó en un ambiente tranquilo y
controlado donde las distracciones se
mantuvieron al mínimo absoluto, lo que aseguró
que los datos fueran confiables. Cada
participante recibió el material y completó
ensayos experimentales de esta naturaleza, en
aislamiento bajo observación directa para
garantizar la completa adherencia a las
instrucciones. Además, la estandarización del
proceso aseguró que todos los participantes
fueran examinados bajo circunstancias
idénticas, mejorando así la fiabilidad de que
pudieran compararse entre sí. Cuando se realizó
la prueba, registramos todas las puntuaciones
individuales e identificamos patrones de
resultados en relación con las opiniones
expresadas en el cuestionario. Aquellas
bastoneras que expresaron un dominio
teóricamente bajo del bastón (21) y problemas
frecuentes de coordinación demostraron
puntuaciones más bajas en la prueba de
movimiento escolar básica, lo que indica que la
autoevaluación en relación con el rendimiento
medido objetivamente.
El análisis conjunto de la encuesta y la prueba
permitió clasificar a los participantes según el
nivel de desarrollo de habilidades motoras finas.
Por lo tanto, podría ayudar a distinguir entre
aquellos que necesitaban entrenamiento básico
bajo un enfoque en habilidades generalistas y
refinamiento técnico, optimizando la
prescripción de ejercicios. Los datos del estudio
también fueron útiles para establecer objetivos
específicos y alcanzables dentro de la
intervención. Esta combinación de ambas
herramientas de diagnóstico permitió una
perspectiva integral sobre la condición de las
habilidades motoras finas en las bastoneras en
la línea de base.
A pesar de que una gran parte de las encuestadas
tiene un dominio medio o bajo del bastón, si se
observa los resultados, el 49% ha informado
tener la capacidad de usar un bastón en algún
grado, y solo el 13% informa no tener dominio
del bastón. Esto también se puede observar en
la prueba, ya que las participantes que
informaron un manejo menos seguro del bastón
fueron reportadas como de inferior
coordinación visomotora. En este sentido, el
resultado refuerza un acuerdo entre la
autoevaluación y la medición estandarizada, lo
que significa que los usuarios de bastón
conocen sus limitaciones técnicas individuales
y estas son realmente ciertas. En cuanto a la
coordinación óculo-manual, la encuesta
encontró que el 60% se considera a mismo
como bien o incluso mejor, mientras que el 11%
dijo que es malo. Esto es algo que la prueba de
Beery-Buktenica confirma y demuestra cómo
las personas con maestría en sincronización
óculo-manual también tendrían problemas para
redibujar esos patrones sofisticados. Lo cual
parece indicar que, aunque hay cierta
coordinación básica disponible para su uso,
podría ser necesario un entrenamiento en algo
tan especializado para lograr el tipo de niveles
altos que se necesitan para una manipulación
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 103
del bastón muy específica y suave en
secuencias. La fuerza de brazo y mano es un
elemento olvidado en la aptitud para el canotaje.
Estas cifras muestran que el 44% de las
personas siente la necesidad de fuerza y solo el
18% cree tener suficiente fuerza física para
manejar la piedra. Esta debilidad puede afectar
la capacidad de mantener el bastón estable
durante minutos y mientras se realizan
movimientos rápidos que necesitan estabilidad
rápida. La prueba de integración visomotora
evidencia esta debilidad indirectamente, aunque
la coordinación masiva también podría surgir de
un déficit de fuerza y resistencia muscular en el
miembro superior (demostrado como un pobre
control del lápiz o trazos inestables en
reproducciones gráficas).
También tiene mucho que ver con la cantidad
de veces que practicas cuando no estás en
sesión. Dos tercios (67%) dicen que solo
practican algunas veces, y una cuarta parte
(24%) nunca lo hace. Cuando la práctica es
irregular e infrecuente, esto puede retrasar la
mejora en las habilidades motoras finas, ya que
habilidades como la precisión o la coordinación
se aprenden a través de la exposición repetida a
una tarea. Esto es evidente en los resultados de
las pruebas, ya que los participantes con menos
práctica de tareas cotidianas tienden a tener
puntuaciones más bajas, lo que indica que la
exposición continua a actividades de
manipulación del bastón es importante para la
mejora del rendimiento. La postura corporal
correcta es otra parte importante del
rendimiento. Mientras que el 35% califica su
postura como precisa, una autoevaluación, el
47% la considera mayormente correcta y el 18%
como incorrecta. La prueba visomotora requiere
que los participantes tengan un dominio
postural de equilibrio sobre sus pies para
realizar cruces correctamente, y se observó que
aquellos con deficiencia postural tenían mayor
dificultad en la ejecución controlada de los
ejercicios. Ese estudio apoya lo que todos ya
han observado; una buena postura no solo es
una forma atractiva de manejar el bastón, sino
que también permite una mejor función motora
fina y eficiencia para mantenerse coordinado
durante el rendimiento.
En respuesta a la afirmación de esta pregunta, el
60% creía que este programa de ejercicios
mejorará significativamente sus habilidades
motoras finas, el 29% cree que mejoraría un
poco, y el 11% creía que no mejoraría. Dicha
diferencia en la expectativa puede impactar la
motivación y, por lo tanto, el nivel de
compromiso durante el entrenamiento. Una
inspección visual temprana sugiere que los
participantes con una visión generalmente
optimista son más propensos a demostrar un
alto compromiso con la tarea y capacidad para
tomar pruebas, mientras que aquellos que tenían
bajas expectativas pueden necesitar motivación
adicional para mantenerse comprometidos
durante todo el proceso. Aproximadamente la
mitad del grupo tuvo dificultad para coordinar
movimientos con el bastón, el 47% a menudo y
el 40% a veces. Los datos agregados también
corroboran este hecho con respecto a la
correlación de estas calificaciones con los
resultados de las pruebas (es decir, que la
coordinación visomotora medida objetivamente
es peor en aquellos participantes que informan
estas dificultades). Este patrón indica que las
rutinas de práctica convencionales son
inadecuadas para abordar estos déficits, y
enfatiza la necesidad de incorporar más
ejercicios de entrenamiento específicos para la
tarea en la preparación para el uso del bastón.
No hay experiencia previa en la realización de
entrenamiento motor fino en herramientas
controladas por dinamómetro. De ellos, el 47%
dijo que nunca había sido entrenado de esta
manera, el 33% informó haberlo hecho solo una
vez y el 20% informó haberlo hecho más de una
vez. Tal falta de entrenamiento sistemático se
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 104
proyecta obviamente en la prueba, con
puntuaciones más bajas metacognitivas sobre
sus experiencias previas. Es evidente que las
habilidades motoras finas no se desarrollan
óptimamente con la práctica general del bastón
y deben ejercitarse específicamente.
El último elemento incluido en el informe para
Samlin es algo de resistencia física
(probablemente presentaciones largas). El 57%
lo ve como al menos algo adecuado, y el 31%
dice que no es muy o nada adecuado. La prueba
de Beery-Buktenica no es una medida directa de
la resistencia, pero cuando se realizó se pudo
ver a algunos niños cansarse y eso podría
disminuir su precisión en los patrones
posteriores. Por lo tanto, esto sugiere que la
resistencia sería parte del programa de
ejercicios además de la coordinación y la fuerza
En lo que respecta al control de velocidad y
dirección del bastón el 49% lo logró
ocasionalmente y el 11% nunca lo logró. Tal
control depende en gran medida de la
coordinación óculo-manual y la fuerza de
agarre, dos capacidades también medidas en la
prueba visomotora. Los trazos y también los
problemas habituales en la proporción y el eje
de las figuras son desviaciones comunes
esperadas por los participantes que encuentran
difícil controlar estos elementos. Dicha
evidencia valida la asociación entre el manejo
técnico del bastón y la destreza manual fina
medida objetivamente. La comparación del
rendimiento percibido frente al rendimiento real
reveló que, aunque los usuarios de bastón son
conscientes de sus déficits, podrían subestimar
su tamaño. Siendo que, en muchos casos,
cuando se califica por la prueba, la aceptación
de su propia coordinación lleva a puntuaciones
bajas, en otras palabras, lo que pensaban sobre
su coordinación no coincide con el estándar
técnico requerido para un soporte efectivo del
bastón. Estos hallazgos subrayan la necesidad
de incorporar evaluaciones estandarizadas en
las decisiones de diagnóstico y programación.
Uno de los hallazgos más significativos es que
la consistencia en la práctica, la fuerza muscular
y los resultados de la coordinación visomotora
están relacionados. Esos tres factores están
interrelacionados de maneras que hacen que la
deficiencia en uno tiende a exacerbar las
limitaciones en los otros. Esto hace que la
ejecución de movimientos a lo largo del tiempo
sostenido (especialmente en deportes menos
breves como el ciclismo) sea menos controlable
debido a la falta de fuerza, disminuye la calidad
de la coordinación y el menor rendimiento de la
práctica significaría un ciclo que perjudica el
progreso de las habilidades. Otro punto que
surge del análisis es sobre cómo la postura
puede afectar los movimientos finos. Las
personas que sostienen el bastón así durante las
pruebas de equilibrio son más propensas a
tardar más en realizar tareas de precisión
mientras caminan. Una forma en que esto se
indica en la evaluación de la prueba es
observando la tendencia de los trazos a
sobreextenderse o demostrar naturaleza. Como
resultado, la postura es mucho más que solo una
estética, es una parte técnica que necesitas
discernir sistemáticamente.
Y algunos rendimientos en las pruebas pueden
predecirse por la experiencia con las
habilidades motoras finas necesarias para este
tipo de tarea. Aquellos participantes
específicamente entrenados se desempeñan
mejor, fortaleciendo que el entrenamiento
especializado es un poderoso influyente en la
coordinación y la precisión del movimiento.
Esto está en nea con la investigación que
sugiere que las habilidades motoras pequeñas se
desarrollan mejor cuando los niños realizan
actividades destinadas a mejorar la
coordinación óculo-manual y las habilidades
motoras finas. Los resultados sugieren que los
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 105
usuarios de bastón perciben correctamente su
fuerza y capacidad para controlar un bastón para
caminar, mientras que probablemente
sobreestiman su grado de coordinación dentro
de los parámetros técnicos confinados de las
pruebas estandarizadas. Esta diferencia enfatiza
la importancia de usar herramientas de
evaluación objetivas para acompañar las
autoevaluaciones y alcanzar un diagnóstico
sólido. Por lo tanto, los datos de la encuesta
pueden complementar la prueba de integración
visomotora para identificar áreas críticas
necesarias para diseñar mejor un programa de
ejercicios. Estas están en las áreas de la acción
de los músculos del brazo superior, la
coordinación óculo-manual y las tareas de
ajuste postural y manipulación, el control de
velocidad y dirección con el uso del bastón,
sugieren interacciones del consumidor
aumentando la intensidad de la práctica. Es
importante que estas variables se integren en un
entrenamiento planificado y progresivo, para
observar acciones significativas de este tipo en
las habilidades motoras finas evaluadas. Este
análisis demuestra que las limitaciones
reconocidas no se atribuyen a una sola razón,
sino a una amalgama de diversos factores
técnicos y físicos. Lo cual requiere que
cualquier intervención apunte a una visión
amplia de la mejora en las habilidades motoras
finas, combinando ejercicios específicos con
fortalecimiento muscular, correcciones
posturales y la eficacia para mantener la
motivación y la práctica. Esta solución integral
es lo que eventualmente llevaría a la mitigación
de las debilidades detectadas y a un cambio
drástico en el rendimiento de los usuarios de
bastón en su respectivo evento.
Conclusiones
Este artículo contribuyó a una comprensión más
amplia de la situación de referencia de las
bastoneras en sus habilidades motoras finas y su
relación directa con el manejo técnico del
bastón, en la Unidad Educativa Pichincha.
Tanto la aplicación de la encuesta como la
Prueba de Desarrollo de Integración
Visomotora de Beery-Buktenica nos dieron una
visión más completa, uniendo percepciones
subjetivas y mediciones objetivas, lo que ilustró
fortalezas y debilidades personales en su vida
habitual para los individuos de esta muestra.
Esta estrategia dual resultó en un diagnóstico
más preciso, ya que las restricciones
identificadas se establecieron a través de
interrelaciones entre múltiples factores físicos,
técnicos y posturales. Los hallazgos obtenidos
entre los participantes a través de la encuesta
mostraron que una gran proporción de ellos
estaba en un nivel medio o bajo en el dominio
del bastón, la coordinación óculo-manual, la
fuerza del miembro superior y la postura
corporal. Debido a que la mayoría de las
bastoneras no practicaban regularmente en
momentos distintos a cuando estaban en
entrenamiento, y un gran número de los
encuestados nunca había tenido experiencias de
aprendizaje dirigidas específicamente hacia
habilidades manipulativas. Hubo una
asociación entre las puntuaciones de las pruebas
y estos hallazgos, en el sentido de que los
participantes que reportaron menos habilidad
obtuvieron puntuaciones más bajas en la
reproducción de patrones gráficos y en la
precisión evaluada del movimiento.
El análisis indicó que la fuerza de agarre del
brazo y la mano predecían el control del bastón,
la estabilidad del torso y la calidad de los
movimientos proporcionados con mayor
duración. Por el contrario, la frecuencia de
práctica infrecuente se asoció con un desarrollo
motor fino restringido, ya que las acciones
precisas requieren repetición continua para
solidificarse. También encontramos que una
mala postura corporal era responsable de un
peor rendimiento no solo en el aspecto estético
del manejo del bastón, sino que afectaba
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 106
negativamente la eficiencia técnica para
ejecutar movimientos controlados. Un tercer
factor que contribuyó a los hallazgos fue la
exposición previa en habilidades motoras finas.
Los participantes que habían sido entrenados en
esta área lograron puntuaciones más altas en la
prueba y se sintieron más seguros en sus
respuestas. Esto mostró que las habilidades
motoras finas no se entrenaron como un efecto
del entrenamiento general de manejo del bastón,
sino a través de un entrenamiento estructurado
en habilidades específicas, como la
coordinación óculo-manual y el fortalecimiento
muscular del miembro superior.
Este tipo de consistencia puede interpretarse
como una validación de la autopercepción que
las bastoneras mantienen en algunas áreas; sin
embargo, pronto quedó claro que los
participantes tendían a tener pocas fortalezas y
virtudes reales, especialmente en coordinación,
lo que sugiere que a menudo se sobreestiman.
Esta fue una observación importante y enfatizó
la necesidad de incluir evaluaciones objetivas
en una instalación de diagnóstico para evitar la
planificación de programas de mejora basados
únicamente en el gusto o la apreciación
subjetiva de las habilidades. Así, se observó que
las bastoneras como grupo mejoraron y podrían
mejorar implementando algunos ejercicios
básicos para la fuerza de la mano. Los
resultados enfatizaron trabajar con diferentes
ejes: fortalecimiento de miembros superiores y
manos, coordinación óculo-manual, ajuste
postural para un mejor control del manejo del
bastón y prácticas ergonómicas de fabricación
de látigos, así como práctica diaria fuera del
espacio de ensayo. El proceso desarrollado
reveló que un diagnóstico sistemático con
herramientas de autodiagnóstico y pruebas
estandarizadas no solo ofrece una identificación
de las deficiencias, sino que también permite
delinear estrategias individuales para
abordarlas. Esta información recopilada de esta
manera proporcionó una base sólida para
estructurar el plan de intervención ajustado a la
realidad del grupo, siempre que pudiéramos
establecer objetivos de mejora continuos y
medibles. Así, el artículo concluyó con un
resumen conciso de dónde estaba el grupo y con
instrucciones fundamentadas para un
fortalecimiento técnico y motor más detallado
para seguir los próximos pasos.
Referencias Bibliográficas
Almonacid, A., Herrera, H., Allimant, A., &
Gómez, G. (2023). Nivel de coordinación
motriz de niños y niñas participantes del
programa escuelas deportivas integrales del
Ministerio del Deporte de Chile.
https://doi.org/10.15517/pensarmov.v21i1.5
1279
Arias, A., & Charry, C. (2024). Experiencia
sistematizadora sobre el manejo y técnica
del bastón en adolescentes del Colegio Gran
Colombia.
http://repositorio.tecnologicopichincha.edu.
ec/handle/123456789/520
Arufe, A., Pena, P., & Navarro, N. (2021).
Efectos de los programas de Educación
Física en el desarrollo motriz, cognitivo,
social, emocional y la salud de niños de 0 a
6 años: Una revisión sistemática.
https://doi.org/10.17979/sportis.2021.7.3.86
61
Barreto, B. (2022). Mejorando la motricidad
fina por medio de actividades lúdicas.
https://repository.unad.edu.co/handle/10596
/53265
Briones, B. (2021). Aplicación de un programa
de actividades lúdicas para mejorar el
desarrollo de la coordinación motora fina en
estudiantes de 5 años.
https://hdl.handle.net/20.500.12893/10031
Bustamante, B., Martínez, M., & Ruiz, R.
(2022). Efectos de un programa físico en el
componente motriz valorado a partir del
cribado de movimiento funcional (FMS) en
estudiantes universitarios.
https://doi.org/10.21830/23460628.108
Chero, C. (2021). Programa de actividades
gráficas para el desarrollo de la
Ciencia y Educación
(L-ISSN: 2790-8402 E-ISSN: 2707-3378)
Vol. 6 No. 10.1
Edición Especial IV 2025
Página 107
coordinación motora fina en niños de cuatro
años.
http://hdl.handle.net/20.500.12423/3897
Chipantasi, C. (2023). Diseño de un programa
de motricidad fina para ejercitación de
funciones cognitivas en adultos mayores.
http://repositorio.tecnologicopichincha.edu.
ec/handle/123456789/819
Chuquilin, C., & Zuñe, Z. (2024). Programa de
actividades prensoras para mejorar la
motricidad fina en niños de 4 años.
https://hdl.handle.net/20.500.12893/13632
Delgado, D., Grasst, G., & Acosta, A. (2022).
La motricidad fina y su influencia en el
desarrollo de la escritura.
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?co
digo=8635215
Guapi, G., & Moreno, M. (2022). Desarrollo de
las habilidades y destrezas motrices básicas:
Lateralidad-coordinación.
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?co
digo=8647022
Ibarra, I. (2025). Programa de talleres gráfico
Plásticos para mejorar la motricidad fina en
niños de 3 años.
https://hdl.handle.net/20.500.13032/39977
Loza, L. (2022). Ejercicios motrices para
afianzar la recepción del voleibol en
estudiantes.
http://repositorio.unjfsc.edu.pe/handle/UNJ
FSC/6261
Mendoza, M., & Bravo, B. (2022). Actividades
físicas para el mejoramiento de la
motricidad gruesa en los estudiantes.
https://revista.uniandes.edu.ec/ojs/index.php
/mikarimin/article/view/2926
Merino, M. (2022). Juegos didácticos para
desarrollar la motricidad fina en niños de
cinco años.
http://hdl.handle.net/20.500.12423/5271
Moreira, M., & Alcívar, A. (2022).
Implementación de rincones lúdicos para el
desarrollo de la motricidad fina.
https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?co
digo=8354939
Paredes, P., & Jara, J. (2023). Programa de
técnicas grafoplásticas para desarrollar la
motricidad fina.
https://hdl.handle.net/20.500.12893/12249
Pérez, P., Sánchez, S., Noa, N., & Ceballos, C.
(2023). Programa de ejercicios sicos
adaptados para la coordinación motriz en
niños de 8 a 12 años.
https://doi.org/10.62452/mr1x1769
Polevoy, P., & Barría, B. (2024). Efectos de un
programa físico de coordinación motriz en
niños rusos de 9-10 años.
https://doi.org/10.47197/retos.v54.104501
Pulgarín, P. (2022). Programa de actividades
de motricidad fina para aprendizaje de
grafomotricidad.
http://hdl.handle.net/20.500.12993/3611
Reyes, R., & Roque, R. (2022). Programa de
técnicas grafoplásticas para desarrollar
motricidad fina en niños de 4 años.
https://hdl.handle.net/20.500.12893/10975
Rodríguez, R. (2024a). Epistemología de la
Cultura Física. Digráfica S.A.
Rodríguez, R. (2024b). Epistemología de la
Educación. Digráfica S.A.
Sagñay, S., & Soledispa, S. (2024). Programa
grafo-plástico para mejorar la motricidad
fina.
https://doi.org/10.47460/uct.v28ispecial.774
Simba, S. (2023). Entrenamiento interválico de
alta intensidad para mejorar la resistencia
aeróbica en bastoneras.
https://repositorio.upse.edu.ec/handle/46000
/9852
Soria, S. (2023). Modelo de planificación
deportiva para mejorar el proceso formativo
en bastoneras.
https://repositorio.upse.edu.ec/handle/46000
/9870
Esta obra está bajo una licencia de
Creative Commons Reconocimiento-No Comercial
4.0 Internacional. Copyright © Danilo Vladimir
Escobar Gavilanes y Reynier Rodríguez González.